martes, 20 de diciembre de 2011

Viernes, esos viernes de fiesta con tus amigas, esos en los que no paras de bailar y reírte. Esos viernes que pase lo que pase no olvidarás, porque ya son muchos.
Esas tardes de risas con todas esas personas de tu alrededor, esas mismas personas que aveces te pueden llegar a sacar de quicio, pero que al mismo tiempo no sabrías donde ir sin ellos.


Y luego hay otras, personas que solo quieren meter el dedo en la llaga, personas que por alguna razón no saben que hacer con su vida que se meten en la tuya.
SIEMPRE HABRÁ ALGUIEN QUE HABLE. 
Pero que le vamos a hacer, siento indiferencia ante sus palabras, no siento dolor por sus insultos, me río a carcajadas con cada una de sus rabietas, es más, gracias a esas personas que solo saben hablar crece mi fama, para bien o mal, pero crece, y poco a poco me voy haciendo hueco en vuestras vidas, ya sea para sacaros una sonrisa o para haceros daño, llegar a vuestro corazón y llenároslo de alegría o dejarlo tan triste y vacío que se cierre.
Tal vez mi corazón se esté quedando frío, o es que simplemente me acostumbré al calor y ahora necesito más, solo se que no me importa lo que piense el resto. SIENTO INDIFERENCIA POR LO QUE ME RODEA.


Solo me importan aquellos que se hacen valer, y tal vez en algún momento me den una puñalada, pero por ahora me va bien.